Mis hijos son pequeños, uno está empezando a dar sus primeros pasos y el otro va al nido. El menor mas travieso que el mayor, será porque observa todo lo que el hermano mayor hace, y aunque no sepa hablar aprende todo. César Junior es un niño muy listo, más listo que su madre, su madre nunca fue lista jajajaja; creo que por eso me hacían bullying cuando era niña.
En mi casa, César y yo debemos tener cuidado con las cosas que están a su alcance, sino al mínimo descuido puede pasar un accidente, así que hemos tomado nuestras precauciones para que eso no suceda.
1. Colocar seguro a los toma corrientes. Cuando nació César Junior, todos los tomacorrientes tenían el seguro de plástico, así nuestro bebé no iba a recibir el tirón de la descarga en el caso, de que por curiosidad, pusiera sus pequeños deditos. Ahora que ya son dos niños pequeños, y César y yo usamos laptops todos los días, pues debo reconocen que los seguros de plástico han desaparecido. Así que debo ser consiente en comprar unos nuevos y jamás dejar una laptop enchufada; y si la desenchufo colocar automáticamente el seguro.
2. Evitar tener muebles de vidrio. En mi casa todo es de madera, o formica, lo único de vidrio son las ventanas, los espejos y una puerta corrediza… pero la puerta corrediza es de vidrio templado. Recuerdo cuando una amiga me contó que tenía un centro de mesa de vidrio, y su sobrino pequeño por andar jugando cerca de ahí, se hizo trizas y a Dios gracias no se cortó.
3. Evitar colocar mantel en las mesas o centros de mesa. Recuerdo que hace poco se dejó una infusión caliente encima de la mesa, y mi hijito pequeño jaló el mantel y la infusión se le cayó en la mano. Se imaginarán el susto que me llevé. Menos mal, la quemadura no fue de gravedad, pero nos enseñó a ser más precavidos.
4. Echar seguro a todas las puertas pequeñas y cajones: las puertas pequeñas y los cajones de los aparadores, muebles y artefactos eléctricos (refrigeradora) es lo que más entretiene a mis hijos. Se divierten cuando abren cada puerta y ven tantas cosas de diferentes tamaños y colores que les provoca jugar con ellas. Recuerdo que un sobrinito mío termino metido en la cajonera de verduras de la refrigeradora, menos mal lo sacaron a tiempo; o mi caso cuando un buen día después de regresar del trabajo encuentro mis calzones tirados (limpios por si acaso) por el pasadizo de mi casa… mi bebé, el más pequeñin, le pareció entretenido jugar con la ropa interior de su madre como trapeador por el piso. Así de limpio es mi hijito.
5. Bajen la tapa del wáter y coloquen seguro: ese cuidado es para todos en general, y más cuidado tienen que haber cuando hay hombres en casa. Ya sabe papá, ya sabe César Junior que se debe bajar la tapa del wáter una vez que terminen de miccionar o defecar. No quisiera ver al bebé jugando con agua amarillita ó algún con su caquita, cual plastilina. Eso trae a mi memoria un chiste que me pasaron por internet, cuando una niña pequeña le alcanzaba agua a su papá en su tazita de juguete. Lo que no sabía el papá, quien era el que se tomaba toda el agua, de donde sacaba el aguita su pequeña hijita. Pues como lo único que estaba al alcance de la niña era el agua del water, pues lo mantenía “hidratado” a su papá con esa misma agüita.
6. A los pies de la cuna o cama de tus hijitos, colocar colchoneta: ¿por qué recomiendo esto? Muy simple, cuando hay niños pequeños que ya se pueden parar y dar los primeros pasos, y aprenden a salir de su cuna o cama. Que no los sorprendan, cómo a mí. Hasta ahora no me explico cómo salió de su cuna mi bebé (cuya baranda no es movible) se dio un volantin en el aire, y cayó en el piso. Mi corazón se paralizó cuando papá me lo contó. Su padre muy relajado me dijo “no se hizo nada, siguió jugando como si nada”. Que dio un salto y cogió impulso de la baranda y salió de la cuna. Menos mal no se hizo nada, pero no se va a esperar a que algo suceda. Así que César tomó la decisión de bajar un nivel más a la cuna para que así el bebé no tuviera que salir de su cama. Ahora está pendiente colocar una colchoneta a los pies de la cuna. Esta misma recomendación va para los padres que por primera vez colocan a sus pequeños en camas individuales, sin baranda de protección, mejor colocar una colchoneta, así que si se caen de tanta vuelta, no se den contra el piso. No pensé que mi bebé sería trapecista, si sigue así, lo llevaré a la Tarumba (circo peruano).
7. Desaparecer todo juguete con piezas pequeñas y adornos: ahí César y yo tenemos un dilema respecto a los juguetes, en cuanto a los adornos no hay problema, se desaparecen y punto. Mi hijito el mayor tiene varios juguetes de piezas pequeñas, y mi otro hijito es muy sabido y siente principal atracción por esas piezas, no sólo para jugar sino para metérselas a la boca. ¿Dejamos a nuestro hijo mayor sin su juguete de piezas pequeñas? para evitar atragantamiento, mejor desaparecerlas o supervisar cuando jueguen con ese tipo de juguetes para evitar que se los metan a la boca.
8. Desinfectar todo los juguetes: con trapo y alcohol: eso nos aconsejaron y eso hacemos con los juguetes de plástico. Es mejor desinfectar con alcohol que se evapora rápido ya que con lejía pues el olor y sabor quedan impregnados en el juguete que en ocasiones es poroso. Mejor el alcohol. En caso de peluches, lavarlos 1 vez por semana por el tema de las alergias.
9. Mantener siempre limpia la casa, pero digo limpia no sólo en el sentido de pasar escoba o sacudir los muebles y pasar trapeador con cloro; sino limpia hasta recoger el microscopico papel que se cayó en el piso, o la microscópica comida que se quedó pegada al piso. Ante cada limpieza, examinar el piso con lupa. Mi hijito el menor, que es el mas listo de la familia, tiene una vista de lince que cuando gatea le alcanza a su madre todos los pequeños y microscopicos restos que encuentra en el suelo, y su madre no los vé. Debo de estar atenta a lo que descubre mi gordito, y no se lo coma.
Aunque son todavía pocos años de experiencia que tengo con mis hijos, espero que mis consejos, les haya sido de utilidad.
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