Buscando productos sin gluten para el bebé

Hace unos meses, una mamita me escribió. Estaba preocupada porque estaba buscando cereales sin gluten para su bebé de 6 meses. Le pregunté si era celiaca su bebé, a lo que me respondió que no lo sabía, sin embargo, tiene predisposición genética pues su esposo y la mayoría de la familia eran celiacos; y por recomendación médica le habían indicado que el bebé consumiera cereales sin gluten y en un futuro le hará los exámenes correspondientes. Así que le recomendé el cereal Hero Baby que es libre de gluten. Igual la mamita le seguía dando leche materna, pero quería intentar darle cereal a su bebé junto con algunas verduritas sancochadas y fruta de textura suave.  Recordé que en varios supermercados se pueden comprar productos sin gluten para los más pequeños de la casa, en caso lo necesiten por alguna intolerancia, alergia o por recomendación del médico:

- Hero Baby: hay de maíz y de arroz, se debe consumir después de los 6 meses. Mi bebé lo consume en ocasiones junto con su leche y le gusta.

- Galletas para bebé Baby Mum-Mum:  estas galletas libres de gluten, huevo y maní, son las galletas más sanas sin gluten que encontré en el supermercado. Mis hijos la consumen y hasta yo la como cuando me da hambre y quiero comer una galleta ligera y fácil de digerir. Hay de arroz, sabor a vegetales y sabor a platano.

- Galletas: esta galleta es para niños a partir de los 12 meses. Son galletas libres de gluten, huevo, lactosa y maní. Al igual que la anterior es una galleta ligera y fácil de digerir. Me encantan.

- Bio Natur Baby: desde España viene esta compota libre de gluten, en diferentes presentaciones: frutas, verdura y pollo. Reconozco que en algún momento me tuve que llevar una compota de verduras cuando salí a un paseo y bueno como opinión personal, le faltaba sabor, jajajaja, pero claro si es bajo de sal. La compota es para bebé a partir de los 6 meses, otras compotas a partir de los 10 meses, por eso hay que leer bien el empaque. Estas compotas salvan de apuro cuando no hay tiempo de preparar algo en casa, o surgieron contratiempos y no sacaste lo suficiente para alimentar al bebé, aquí está la solución.

Como verán no sólo yo he probado productos para bebés, sino también mis hijos. La verdad, los productos sin gluten para bebé me han salvado muchas veces, cuando no encontraba nada ligero en el supermercado, sin gluten para comer y para decir a verdad, hasta ahora consumo las galletas Mum-Mum.

NOTA: Por favor, sólo sigan la dieta libre de gluten para su bebé si es que el médico lo recomienda por algún problema de salud. Además, es conveniente acudir al nutricionista para que le dé un plan de dieta especial al bebé y así su alimentación sea balanceada. La leche materna es irreemplazable, y el mejor alimento para el bebé a no ser que sea intolerante a la lactosa, siempre hay alternativas de reemplazo.

Aparte de alimentos, no puedo evitar recomendar los productos LaRoche para el aseo de la piel delicada del bebé:

- El lipikar gel lavant es para pieles sensibles desde el recién nacido hasta los tres años, se puede utilizar para el baño del bebé tanto como champú como jabón líquido de cuerpo. A partir de los 3 años y adelante es muy útil solo para el lavado de rostro y cuerpo.

- El lipikar syndet ap+ es para pieles resecas con atopia dedesde recién nacido hasta los tres años 0 a 3 años, se puede utilizar para el baño del bebé tanto como champú como jabón líquido de cuerpo. A partir de los 3 años y adelante es muy útil solo para el lavado de rostro y cuerpo.

- Cicaplast Baume, es lo mejor que le ha pasado a la piel de mi bebé para las escaldaduras, altamente recomendado por mí. Mi bebé tiene una piel tan delicada como mamá.
Bueno, espero haberles ayudado en caso busquen algún producto sin gluten para su bebé o su niño pequeño. Un abrazo.

Remedio infalible para el resfrio… y sin gluten

El viernes pasado, fue un día con mucha humedad y una llovizna ligera se presentó temprano en la mañana. Yo me apuré en irme a trabajar mientras me despedía de mi esposo y mis pequeños hijos. Cada día que pasa el momento que más difícil se me hace es despedirme de mis hijos y creo que cualquier mamá que trabaje fuera de casa, puede comprenderme. Se me arruga el corazón especialmente cuando mi hijo mayor me dice:

-Mamá, no te vayas al trabajo... dame un abrazo y un beso –me dice mi hijo César Junior.

A veces pienso dos veces antes de abrir esa puerta y salir al trabajo, pero debo hacerlo… no sin antes darles un fuerte abrazo y besos a mis hijos, con la promesa que mamá pronto estará de regreso para estar con ellos.
Llegando al trabajo empecé a estornudar, no pensé que fuera resfrío, pensé que tal vez era una simple alergia que pronto se me iría en el transcurso del día, pues me equivoqué.
Regresé a casa y disfruté jugando con mis hijos. Mi congestión se paraba en ocasiones, así que supuse haber superado la “alergia”, un buen descanso me haría bien.
Llegó finalmente el sábado y yo pues estaba muy contenta, iba a pasar más tiempo con mi familia. El fin de semana íbamos a salir a un cumpleaños infantil en la mañana… sólo deseaba que no hiciera tanto frío, ni tanta humedad como en los últimos días, no quería que mis hijos se resfriaran, sin imaginarme que la resfriada era yo pues la garganta ya me empezaba a doler.

Con el dolor de mi corazón le dije a mi esposo que llevara a mis hijos a la fiesta de cumpleaños y pasaran un buen rato, mientras mamá iba a descansar y a tomar la poción mágica para el resfrio y sin gluten.

Pues bien, utilicé 4 ingredientes:
- Agua caliente (1 taza)
- Miel de abeja (1 cucharada)
- Jugo de limón (1 unidad)
- Kión rallado (1 pizca) (+)
(+) Como no tenía kion fresco, tenía una botellita de kión seco rallado de la marca Badia libre de gluten.

Me tomé varias tazas y de verdad, junto con un buen descanso, me sentí mucho mejor. Eso sí el domingo estaba recuperada y pude disfrutar de mi familia. Espero que si en algún momento se resfrían o le den gripe, la poción mágica les pueda ayudar. Un abrazo y gracias por leerme.

Los celiacos si podemos tomar licor

Los celiacos una vez después de ser diagnosticados, hemos tenido que modificar estrictamente nuestra dieta, a una dieta libre de gluten, es decir: sin trigo, sin avena, sin cebada y sin centeno. Simplemente la vida nos dio un giro de 360 grados, así que todos nosotros los celiacos tenemos mucho cuidado en lo que digerimos.

¿Qué pasa con las bebidas alcohólicas?
Pues sí, los celiacos podemos tomar bebidas alcohólicas, ninguna que tenga gluten por supuesto, ni tampoco ni colorantes, ni saborizantes. Los celiacos pueden tomar:

1. Bebidas Destiladas: según lo comunicado por la Asociación de Caliacos del Perú y sensibles al gluten, en el proceso de destilación, se pierde la proteína del gluten. Entre los destilados más conocidos están:

- Pisco: el famoso destilado de uva de Perú, es libre de gluten en su estado puro. Eso sí, si van a preparar un pisco sour tengan en cuenta el jarabe de goma que puede contener gluten, así que mejor tomarlo puro.

- El vodka: es un destilado, en base a varios granos y algunos almidones. Por el proceso de destilado pierden todo el gluten. Si van a  consumir vodka que sea en su estado más puro, sin colorantes ni saborizantes. Ver enlace 1 y enlace 2

- Coñac: destilado que se obtiene a partir del vino de uva blanca obtenido de cepas cultivadas en Francia. Ver enlace 3.

- Brandy: si bien es un licor que proviene de la cebda, por el proceso de destilación pierde el gluten.

- El Wisky: es un licor que pasa por proceso de destilado dos veces. Algunos celiacos la consumen y otros no porque continuamente pasan por observación al agregarles otros ingrediente.

- Ron:licor obtenido del jugo de la melaza o caña de azúcar.

- Anís: licor proveniente de las semillas de anís.

- Tequila: proviene de una planta, de nombre agave.


2. El vino
Obtenido de la fermentación de la uva, no habría problemas en consumirlo, aunque siempre queda la inseguridad, si es que al vino no se le habrá echado algo adicional. Aquí en Perú, encontré varios vinos de Bodegas Argentinas, entre ellos la marca Doña Paula. Según lo comentado por la especialista peruana en vino, Rocio Caceres (Chio LC)  en su Facebook, menciona que el vino es LIBRE DE GLUTEN, Apto!!!! Lo están vendiendo en supermercados y para mi sorpresa está de oferta ahora.  Se los menciono para quien desee adquirirlo y sea amante del buen vino.

3. Champagne: vino espumoso proveniente de varios tipos de uva.

4. Sidra: licor obtenido de las manzanas.

5. Cremas: el Baileys Irish Cream, es un licor compuesto por whisky y crema de leche (lactosa). APTOOO, y me alegro, me encanta!

Adiós a la cerveza con gluten ¡bienvenida la cerveza sin gluten!

La cerveza está hecha de cebada por lo tanto los celiacos no debemos consumirla. Sin embargo, hay empresas cerveceras que están sacando una línea de cervezas aptas para celiacos y están ingresando al Perú. Tenemos la DAAS y la DAMM que pueden encontrarse en algunos supermercados Wong.

Todo celiaco es diferente, a algunos les cae bien la cerveza sin gluten a otros no tanto, sería cuestión de probarlas.

Anécdota de Mamá Celiaca: Comiendo un picaron libre de gluten

La Casa del Celiaco, mas conocido como la Casa del Violeta el día 14 de Setiembre publicó en su fanpage que el sábado 16 de Setiembre, iban preparar PICARONES LIBRES DE GLUTEN, y que hiciéramos nuestros pedidos con anticipación.
Sinceramente, salté de la alegría, al finnnn unos picarones libres de gluten. Inmediatamente, no dudé ni por un minuto en publicarlo en mi fanpage, hasta pensaba declararloe se día: El Dia del Picaron Libre de Gluten.

El Picaron es un dulce peruano en forma de aro, hecho básicamente de harina de trigo y frito en aceite y bañado en miel de chancaca. Se dice que su procedencia es de España, por los buñuelos.

Me comuniqué con Violeta para pedirle 3 porciones de picarones, y totalmente entusiasmada le avisé a mi esposo César que debíamos ir el sábado a La Casa del Celiaco como de lugar. César con la tranquilidad que le caracteriza, trató de tranquilizarme ante el cuadro de euforia que tenía. Es que son pocas veces al año que se prepara picarones sin gluten, era un evento imperdible.
Finalmente llegó el esperado día, y toda mi familia se alistó para ir. En mi fanpage, me escribió una de mis seguidoras de mi fanpage, con quien tenía bastante comunicación por chat y habíamos formado una bonita amistad, me dijo que también iría y ¡nos podríamos conocer!. Mi entusiasmo se duplicó.
Fui la primera en llegar, y pedí mis 3 porciones de picarones. Mientras esperaba, no dude en tomar una caja de alfajores libres de gluten rellenos con manjarblanco sin lactosa además de mi bolsa de galletitas aptas hechas por Violeta. Todo eso era mi entremes… también les invité a mis hijitos. Reconozco que soy de buen comer.
¡Llegaron los picarones! Colocaron las tres porciones en la mesa, y me apresuré a comerlos. Aquí los pasos detallados para disfrutar un picaron:

1. Mirar el objetivo detenidamente
2. Prepararse para probar el primer bocado
3. Probar
4. ¡A disfrutar!

Cuando engullí mi primer picaron, escuché una voz que me decía:

-¡Hola Carmen! –me dijo Jessica, con una sonrisa de oreja a oreja.

El picaron se me atracó en la garganta, ¡pero eso me pasa por tragona!

Sólo atiné a sonreir y a abrazar a mi nueva amiga. La verdad, estaba muy contenta de conocerla. Me presentó a su esposo e igual sólo atiné a sonreir porque tenía el picaron en la garganta. Cuando finalmente me lo pasé, pude conversar con ella, felices de habernos conocido.
Y aquí otra vez me dispuse a engullir mi siguiente picaron y escuché otra voz que me decía:

-Te conozco, tu eres Mamá Celiaca Cero Gluten, te leo, gracias por los consejos para el resfrío -me dijo toda entusiasmada mi nueva amiga Milady.

Otra vez, tenía un nuevo picaron atracado en la garganta e hice lo mismo que la vez pasada, sólo atiné a sonreir.
Finalmente pude comer mi plato de picarones, y muy feliz conversé con mis nuevas amigas.
Debo reconocer que el encuentro con las dos chicas, fue increíble. Me sentí como en familia, me encontré con dos personas que compartían mi misma dieta y compartimos experiencias. Me sentí tan bien conversando que se me olvidó por completo que debíamos ir a una fiesta infantil. No me fuí sin despedirme antes de Violeta y agradecerle los ricos picarones.

Se me hizo corta esa reunión, pero quedó la promesa en volverme a reunir con mis nuevas amigas.

Mamá Celiaca con problemas al digerir semillas

Siempre he sido cuidadosa cuando he seguido mi dieta libre de gluten, y he sentido bastantes cambios desde que empecé hasta ahora, todo para bien.
Ahora, en el largo camino de lo que es seguir la dieta libre de gluten he tenido problemas al digerir ciertos alimentos, muy aparte que soy alérgica a varios de ellos, los he evitado para sentirme mejor.
Pero ¿qué sucede cuando no soy alérgica a esos alimentos e igual me caen mal? . Les contaré mi caso en particular, y es que me caen muy mal las semillas de chía y linaza.

En el desayuno, mis hijos, mi esposo y yo, los fines de semana, comemos una mazamorra de kiwicha y quinua  en el desayuno. Hasta ahí todo bien. El inconveniente surgió cuando mi esposo decidió agregarle chía y linaza, pues había leído de las propiedades saludables de ambas semillas.

Mi familia feliz de comer su mazamorra endulzada con azúcar rubia y todos bien. Sin embargo, cuando yo como la misma mazamorra con chía y linaza, me da un cólico horrible y me manda al baño volando. Tomo mis enzimas digestivas para que me ayuden a aliviar el cólico, pero el alivio no es tan inmediato.  Ya restablecida, lo primero que se me viene a la mente es que la mazamorra tenía gluten, por contaminación cruzada en mi cocina, pues los ingredientes eran sin gluten. Pero cuando yo misma supervisé la elaboración de la mazamorra, no había ninguna contaminación. Entonces cambié de marca y compré otra marca libre de gluten… el mismo efecto me causó. Así que muy preocupada, decidí investigar y di con la respuesta.
Me acordé que aparte de ser celiaca tenía el colon irritable. El colon irritable o «Síndrome del Intestino Irritable» (SII), es un cuadro crónico caracterizado por la existencia de dolor abdominal y/o cambios en el ritmo intestinal (diarrea o estreñimiento). Los síntomas más comunes son la presencia de gases, dolor y distensión abdominal y alteración en el ritmo intestinal Ver

Pues bien, volviendo al tema de las semillas de chia y linaza descubrí que ambas podían ocasionar trastornos digestivos, en especial a personas con el colon irritable como es mi caso. Me aconsejaron consumir las semillas trituradas, pero por el miedo a que nuevamente me den los cólicos, desistí de la idea.

Ya conociendo eso, decidí despedirme de las semillas y buscar unas nuevas alternativas para una alimentación saludable.
Gracias por leerme.

Conociendo a un nuevo grupo: Los Celiacos Asintomáticos

Cuando decidí crear este blog, lo hice para comunicar a las personas qué era la enfermedad celiaca, más conocida como celiaquía, cuales eran los síntomas, y como se puede llevar una vida normal teniendo esta condición; siguiendo una alimentación libre de gluten, es decir: sin trigo, sin avena, sin cebada y sin centeno (SIN TACC).

También detallé en post anteriores cada uno de mis síntomas, desde que era bebé, niñez, adolescencia y adultez, que finalmente confirmaron que tenía celiaquía. En cada uno de mis post, he tocado algún tema relacionado a mis síntomas, porque pensé que todos los celiacos eran sintomáticos, pero en realidad me he dado cuenta que me faltaba tocar el tema relacionado a quienes no los tienen.

Hace poco que participo del grupo del Fanpage de Celiacos y Celiacas de Argentina, y me sorprendí que existían gran cantidad de celiacos asintomáticos, y surgieron en mi cabeza muchas interrogantes. Así que no dudé en hacer la consulta a sus seguidores sobre estos casos, y  a continuación transmito una síntesis de sus respuestas:

Un celiaco Asintomático, es una persona que es diagnosticada con celiaquía pero no presenta síntomas comunes de un celiaco, ya que el síntoma más común de la celiaquía son problemas gastrointestinales. 

¿Cómo les detectaron la celiaquía, si son asintomáticos?

1. Conversando con varios celiacos argentinos asintomáticos me comentaron, algunos, que al tener un familiar directo celiaco, decidieron hacerse el descarte, sin tener los síntomas comunes de la celiaquía, y de ahí les dio el diagnóstico positivo. ¿Por qué lo hicieron? La respuesta es sencilla: La celiaquía tiene condición genética.

2. Otros celiacos asintomáticos me manifestaron que nunca tuvieron problemas gastrointestinales, por consiguiente, llegar al diagnóstico les tomó más tiempo y muchas veces gracias a la pericia del médico que fue muy meticuloso en el caso.

¿Qué problemas de salud tenían estos celiacos sin dolencias gastrointestinales?

Más allá de la diversidad de respuestas que tuve, la mayoría tenían uno o dos de los siguientes síntomas antes del diagnóstico:

- Caída del cabello
- Irritabilidad y depresión

- Dolores articulares

- Anemia

- Alergias

- Deficiencia de Magnesio

- Acidez

- Inflamación del abdomen

- Plaquetas bajas

- Várices en el esófago

- Continuos resfríos

- Migrañas

- Alteración en la hormona de la tiroides

- Eczemas

- Seborrea en el cabello

- Endometriosis

- Diarrea

- Falta de calcio en los huesos

- Problemas en el crecimiento de los niños

- Abortos espontáneos e infertilidad
- Bajo peso
- Candidiasis

En conclusión, recibí una infinidad de síntomas y, sobre todo, me sorprendió que los médicos los hayan enviado a realizarse el descarte de enfermedad celiaca, por alguna de ellas que no les había encontrado relación alguna! 

Ahora, cada uno de estos síntomas eran aislados para cada persona, tanto niños como adultos. A primera impresión, los médicos trataban estos problemas de manera individual, pero al no encontrar mejoría recién les descartaban la enfermedad celiaca y ni por la cabeza se les pasaba que eran celiacos.

Debo reconocer que Argentina, están mucho más informados sobre la celiaquía que en mi país, así que la mayoría de los médicos conocen bastante bien del tema. En algunos casos, el médico decide hacerles de inmediato el examen de celiaquía cuando el problema es la anemia, aunque sea leve, porque es un indicador claro de enfermedad celiaca. En cuanto al resto de síntomas, el diagnostico finalmente surge cuando el médico agotó todos los recursos en tratar este problema de salud específico de manera individual, sin hallar solución, para luego solicitar el descarte. 

¿Qué siente un Celiaco Asintomático si consume gluten?

Los celiacos asintomáticos confían en hacer bien la dieta, pues cuando consumen el gluten directamente no sienten nada, en comparación de un celiaco sintomático como yo; sin embargo, notan evidente mejoría en el problema de salud que tenían cuando siguen la dieta libre de gluten. Ellos prefieren seguir la dieta por responsabilidad, para evitar cualquier complicación con su salud y siempre se hacen un chequeo para ver si los indicadores en los análisis de sangre son normales.

Como conclusión, de esta corta pero productiva investigación, me atrevería a decirles, que si alguien tuviera algún problema de salud y no encuentran la solución a ese problema, no descarten en hacerse un examen de celiaquia. Sugiérale a su médico e insístale que le haga una orden. Cuanto más temprano sea dado el diagnóstico, más rápida es su recuperación. Aquí estará Mámá Celiaca Cero Gluten si necesitan algún consejo al respecto.

Y a los médicos que me leen, por favor, nunca descarten que su paciente sea celiaco cuando recurran a ustedes por un problema de salud, tal vez sea uno asintomático.

Son sólo un par de consejos de esta Mamá Celiaca. Gracias por leerme.

¿Qué hacer ante una intoxicación por gluten?

En algún momento, algún celiaco, se habrá intoxicado al ingerir gluten (el gluten es una proteína presente en el trigo, avena, cebada y centeno). De pronto, a un celiaco se le antoja comer algo con gluten, prueba un poquito y cuando reacciona... ya es tarde, el daño ya está hecho. O cómo en mi caso, comí algo aparentemente libre de gluten, pero mi organismo se dio cuenta que sí tenía, por la migraña, dolores estomacales y de las articulaciones que se me vinieron a la media hora de comer el alimento contaminado. Se debe actuar inmediatamente. Las recomendaciones que doy a continuación, se basan en mi propia experiencia y me han dado resultado, espero que puedan servir para alguien mas.

Medidas a tomar:

1.       Si un celiaco descubre que está comiendo algo con gluten, dejar inmediatamente de comerlo.

2.      Si aparecen cólicos estomacales, hacer lo siguiente:

-Tomar una infusión de anís o manzanilla o muña.
-Tomar medio vasito de agua con una cucharadita de bicarbonato.
-Oler un poco de algodón para aliviar las náuseas.
-Si tienes enzimas digestivas libres de gluten a la mano, tómalas inmediatamente. Yo tengo las enzimas digestivas Gluten Assist (un pariente me las compró en Estados Unidos), mis pastillitas de emergencia, que me ayudan a digerir el gluten en caso de contaminación. Cuando descubro que he comido algo contaminado, me tomo dos. En Perú, hay otras enzimas digestivas que ayudan a digerir el gluten, como Trienza.
-Si se presenta un fuerte ardor estomacal o dolor en la boca del estómago, tomar enzimas digestivas de papaya (Sundown Natural).
-Consumir una dieta de blanda, libre de gluten, y seguir la dieta por algunos días. Sugerencias:
Desayuno: panetela (arroz tostado hervido con agua, canela, zanahoria, membrillo, pizca de sal y azúcar). No consumir la zanahoria al final porque fermenta rápido.
Almuerzo y Cena: sopa de pollo con papa o arroz (le puedes echar zanahoria, pero no la consumas, se fermenta rápido en el estómago).
-Cuando se presente mejoría, tomar algún probiótico para reinstaurar la flora intestinal. Yo tomo floratil o enterogermina, pero mejor que lo recete el médico.
-Si viene diarrea, mantenerse hidratado, tomando suero oral.
-Si aparecen comisuras y aftas, aplicar bicarbonato en la zona afectada.

Consejo: si se complica el cuadro, con dolores estomacales insoportables y diarreas continuas acudir inmediatamente al hospital o a la clínica. Tal vez no sea intoxicación por gluten, sino infección.
Nota: Si el que ha sufrido la intoxicación es un bebé o niño pequeño llevarlo inmediatamente al hospital o clínica. Si tiene diarrea mantenerlo hidratado mientras se lo traslada a un centro de salud.

3.       En caso de Migraña:
-Lo ideal es descansar: tomar una siesta y relajarse.
-Oler un poco de alcohol, para aliviar las náuseas.
-Si tuviera un medicamento libre de gluten para el dolor de cabeza y migraña, tomarlo.
Consejo: si se complica el cuadro, acudir inmediatamente al hospital o a la clínica.

4. En caso de dolores musculares y articulares:
-Descansar y evitar realizar trabajos que requieran esfuerzo extra.
-Darse un baño de inmersión de agua tibia con un puñado de Sal de Epsom, muy bueno para dolores musculares, articulares y la psoriasis.
-Tomar 1 cucharadita de cúrcuma diluida en un vaso de agua tibia, con una pizca de kión y pimienta negra todos los días (gracias Ana por la receta).
-Si tuviera un medicamento libre de gluten para los dolores musculares, tomarlo.

Consejo: si se complica el cuadro, acudir inmediatamente al hospital o a la clínica.

5. En caso de aparición de herpes labial:
-Tan pronto sientas la picazón, no esperar mas, aplicar Aciclovir en crema.
-Acudir asistir inmediatamente al médico para que detenga el brote. Es muy probable que recete Aciclovir en pastillas.
-Descansar y relajarse.
-Seguir dieta blanda. Aumentar consumo de frutas, verduras y eliminar alimentos picantes y condimentados.

Espero haberles ayudado con estos consejos. Un abrazo.

Confesiones de una Mamá Celiaca

Como sabrán soy celiaca y mamá también. Hay cosas que como mamá celiaca me frustan que no puedo realizar con mis hijos, sin embargo, a pesar de todo hago lo posible para que ellos sean felices y sentirme bien también.

1. Cuando debo probar la comida con gluten de mis hijos: mis hijos no son celiacos, así que pueden comer de todo. Yo trabajo y en ocasiones la niñera es la encargada de hacerles la comida. Recuerdo una ocasión que hizo una sopa con fideos de trigo, me tocó probar la sopa. No bastada con olerla o ponerme un poco en la mano… debería saber si estaba en buen estado. La probé y luego rápidamente me lavé la boca, aunque ya era tarde. Una vez, una mamita celiaca hizo lo mismo y se llenó de ampollas. Desde ese día decidí, que las comidas serían sin gluten en casa para poder probarlas, y mis hijos en el desayuno podrían comer pan de trigo.

2. Las fiestas de cumpleaños infantiles: ¡qué difícil sobrellevar eso! Ojalá y se hubiera quedado como cuando era niña que me daban mazamorra de maíz morado y arroz con leche. Debo reconocer que todo me provoca, pero me alegro que mis hijos puedan disfrutar alguito de los dulces. El caso más complicado, que escuché fue el testimonio de una mamita celiaca que fue al cumpleaños de un amiguito de su hijo de 1 año, que era celiaco también, y lamentablemente solo llevó galletas sin gluten. No sabía que hacer para impedir que su hijito viera los dulces de la fiesta y le provocara. Sólo atinó a ponerse en un rincón con su hijito y abrazarlo de impotencia. Mamita si alguna vez te ha pasado eso, tranquila, para la próxima vez lleva una bolsa llena de dulces libres de gluten para dárselos a tu hijito y disfrute del cumpleaños.

3. Los ejercicios y dinámicas con mis hijos: ahí paso otra dificultad. Mis hijos son pequeños, al mayor le encanta correr y al menor ya aprendió a caminar y a correr también. Cuando el mayor me dice “Mamá corre, juguemos a las chapadas o salta conmigo mamá”, en verdad que lo hago, no quiero que piense que su mamá es una aburrida y no quiere jugar con él. Corro y salto hasta lo que me aguante mi dolor de rodilla y mis problemas a la columna.

4. Mamá te invito una galleta: cuando mis hijos, comiendo un dulce, sin darme cuenta me ponen una galleta con gluten en la boca ¿Qué hago? ¿Lo boto en frente de ellos?, pues disimuladamente me lo quito de la boca y hago que me como la galleta. Luego corro a lavarme la boca y las manos.

5. Mis hijos no son celiacos así que no hace falta que comunique nada a su entorno cercano. Pero en el caso de las mamás con hijos celiacos deben comunicarle la condición de sus hijos a personas de su entorno, como familiares, personas del colegio en donde estudian sus hijos para que estén al tanto de su alimentación, evitando que coman lo que un amiguito o compañero del colegio le inviten. Existe en algunos colegios, la dinámica de que los niños manipulen la harina de trigo, si tu hijo es celiaco, comunicarle con anticipación a la profesora que no manipule nada de tenga que ver con el trigo, avena, cebada y centeno.

6. Paseos con los hijos: en mi post anterior conté lo difícil que fue para mí ir a un paseo con mis hijos a una granja, porque soy altamente alérgica a los animales y al heno. Bueno si bien tuve mi crisis, reconozco que no tomé mis precauciones, así que la próxima vez llevo mi mascarilla y tomo mi antialérgico antes de ir a cualquier sitio donde haya animales.

7. Comer fuera de casa: ahí si para las madres con hijos celiacos, la ven súper difícil. Lo ideal es que vayan a un restaurante exclusivamente donde haya comida libre de gluten, pero hay pocos en el Perú. Recomendaría que cargaran siempre una lonchera apta para tu hijito o en todo caso explicarle con lujo de detalles al mozo y cocinero del restaurante, los cuidados que debe tener en la preparación de la comida, pero OJO aún así corres el riesgo de que exista contaminación cruzada. Con mis hijos no hay problema cuando comen afuera, yo sí tengo el problema así que tengo a mi mano mi lonchera o sino solo como pescado al vapor dándole todas las indicaciones necesarias al mozo, y teniendo a la mano las enzimas digestivas especiales para digerir el gluten.

8. Estar atentas a cualquier pregunta sobre la alimentación de los hijos: siempre habrá gente que no sepa en qué consiste la dieta libre de gluten, paciencia, a explicarles con sumo detalle de que se trata por el bienestar de tus hijos. En mi caso, yo lo cuento, por mí, para que comprendan mi condición.

9. Conseguir medicinas sin gluten para los hijos: Aquí en Perú, no se sabe que medicina es libre de gluten, salvo las incluidas en una lista que publicó la Asociación de Celiacos y Sensibles al Gluten del Perú, años atrás de un laboratorio. Uno tiene que estar llamando a todos los laboratorios para ver si la medicina es apta para celiacos. Mis hijos no son celiacos y menos mal, no tengo que llamar al laboratorio para preguntar por medicinas libres de gluten, sólo lo hago cuando me enfermo y debo tomar medicina. En caso de los niños celiacos, los padres deben estar llamando al laboratorio. Contaré que hace unas semanas, decidí ayudar a unas mamitas que preocupadas por darle un antialérgico a sus hijitos, preguntaron si el Allegra pediátrico es libre de gluten. Me solidaricé con ellas y decidí llamar al laboratorio Sanofi. Dejé mi consulta por teléfono, dejé mis datos personales y les envié un correo desde su misma página web. Llamé varias veces durante los siguientes días para obtener una respuesta. Se demoraron aproximadamente dos semanas en responderme ¿pero cómo era posible que se demorarán tanto?, le cuestioné eso mismo a la persona encargada y me dijo que les tomó tiempo averiguar si todos los componentes eran libres de gluten. Me duele decirlo, pero me dí cuenta que no pensaban en los celiacos cuando elaboraron la medicina. Y al final, Allegra Pediatrico, es libre de gluten, confirmado por Sanofi.

10. Evitar darles besos a mis hijos cuando me sale herpes labial: como sufro Dios, sabes cómo sufro no darles un beso a mis amores. Me pongo mascarilla, pero igual mi hijito menor me la quita. Tengo que esperar una semana para besarlos sin problemas.

11. Siento en ocasiones que no me invitan a ninguna reunión por el tema de la comida, no saben que ofrecerme, como dicen aquí “tiran la toalla conmigo”, jajajaja. Bueno, no importa, mientras sea yo, y no mis hijos los perjudicados. Si fuera el caso de niños celiacos, se me rompería el corazón que los excluyeran de las reuniones o fiestas ¿pero es que acaso no se pueden informar que come un celiaco? Basta con tener los cuidados en la cocina y no ofrecerles nada de trigo, avena, cebada y centeno. Esto es una gran prueba de a quien verdaderamente le importas y te quiere de verdad.

Bueno, les envié una lista de las dificultades que paso por ser Mamá Celiaca junto con experiencias de mamás con hijos celiacos. A pesar de todo eso, estas experiencias hacen a una madre más fuerte, más preparada y atenta a las necesidades de los hijos. Siempre hay una luz de esperanza en que al día siguiente todo será mejor o encontrarás a alguien que pueda ayudarte en cualquier dificultad.

¡Aléjate Mamá Celiaca! Tu hijo está jugando con harina

Hace aproximadamente un año atrás, el nido de mi hijito César Junior organizó un paseo a una granja ecológica.

César me animó a ir y pasar una mañana simpática con nuestro hijito mayor, con sus amiguitos y las profesoras del nido. Los niños conocerían algunos animalitos e interactuarían con ellos, verían algunas plantas y realizarían unas dinámicas. Había que llevar almuerzo porque nuestra estadía sería larga, así que ¡a preparar todo se ha dicho!.

Y llegó el gran día. Pedí permiso con anticipación al trabajo, para pasar un buen día en familia.

Nos fuimos con buzo, muy animados por la visita. Mi hijito vería de cerca algunos animalitos de la granja. Esperaba que no se asustara, aunque ya había visto varias veces los videos de “La Granja de Zenón” y conocía perfectamente los animalitos… aunque claro, eran dibujos animados, estos serían de verdad.

Llegamos a la granja, todos los niños salieron de la mano de sus padres y las profesoras dirigían al grupo. Y de pronto, estornudé.

-Ayyy, nooo, no me acordaba que era alérgica al pelo de animal y al heno –le dije a César.

-No te preocupes, luego tomas tu antialérgico –me dijo César.

-Será cuando llegue a casa -le dije- no he traído ninguna pastillita. No importa, sólo serán unas horas.

Al primer sitio a dónde fuimos, es a ver a los gansos, patitos y pollitos. César Junior estaba contento de darles alpiste a los animalitos, y mi esposo César hasta se animó a tocarlos. 

¿Y yo? Pues ahí estaba en un rincón, mirando todo con un mar de moco en la nariz.

-Tal vez no fue buena idea venir aquí –me dije con la voz toda gangosa- encima se me está acabando el papel higiénico.

Luego mi hijo con sus amiguitos, se fueron a pintar macetitas de barro.

-¡Qué bonito! Mi hijito, el pintor –exclamé, mientras lo veía pintar, con detenimiento, la macetita.

Todos los niños muy felices pintando todo. Mientras lo miraba a mi hijito, miraba todo lo que faltaba recorrer, y me traumaba. Por suerte, había conseguido más papel higiénico.

-Ahora vamos a ver a los cerditos –exclamó entusiasmada la profesora.

Los niños fueron al sitio, y cogieron un baldecito con comida para alcanzárselo a los cerdos, que se encontraban en un espacio cercado. Los cerdos comían con tanta voracidad la comida del balde, que tuve que ayudar a mi hijito para que no se le cayera el balde con comida que le acercaba al cerdo… de paso que al cerdito, yo lo bañaba de moco, por cada estornudo que daba. 

Sinceramente ya no aguantaba, encima que había un olor muy fuerte a excremento de animal que se me había pegado a mi nariz, aunque cuanto más moco me salía, menos olor sentía… así que, a pesar de todo, mi alergia me daba cierta ventaja.

-César, otro día traigo mascarilla –le dije a mi esposo.

-Carmen, este… creo que has pisado caca –me dijo César.

-¿Qué cosa? –le pregunté- ¿dónde está?

-Veo algo en la planta de tu zapato –me respondió César- puedes limpiarte en un ladito, en donde haya pasto.

Volé hasta donde había pasto, para quitarme “esa cosa” que se me había pegado. 

-Caray, encima de moco, se me pegó la caca –murmuré- bueno menos mal, que ya salió.

Ya limpia, fui directamente a dar alcance a mi esposo y a mi hijo. Parece que me había alejado regular, porque no los ubicaba y estuve caminando por un buen rato. Cuando finalmente los encontré, me acerqué rápidamente para ver lo que estaban haciendo, y César salió a mi encuentro con cara de asustado. 

-Aléjate, aléjate –me repitió de manera insistente –mientras movía continuamente las manos para alejarme.

-Pero ya me quité toda la caca pegoteada, no estoy apestando –le respondí a César.

-César Junior está jugando con harina –me respondió alarmado César.

En ese momento, miré con detenimiento el sitio en donde estaban los niños, y divisé una nube blanca de harina esparcida por el ambiente.

-Miércoles (por no decir, otra cosa) me voy corriendo –le respondí a César.

No recuerdo hasta dónde me alejé, pero lo suficiente para que no me llegara la nube de harina. Pasaron unos minutos, y me acerqué al sitio. César me esperaba, con una sonrisa y riéndose entre dientes.

-Jamás se me hubiera ocurrido que jugarían con harina –le dije a César, un tanto mortificada. 

-Ahora nos toca ver los peces –me dijo César- vamos.

Fuimos a ver los pececitos, hasta que un pajarito pasando por ahí, me cagó encima.

-Pucha, ojalá y tanta cagada me traiga plata –le dije a César- ayy, sorry no debería hablar así, pero me siento fatal.

Terminó la visita. Está demás, en decir, que fui la primera en entrar a la ducha, tomé mi antialérgico y mi ropa la puse a lavar con agua caliente. La alergia me duró tres días, pero el antialérgico ayudó bastante. Aún así, nuestro hijito la pasó muy bien en compañía de su familia… valió la pena el sacrificio.

Lección que aprendí

 Si soy alérgica y voy a una granja, tomaré mi antialérgico antes de la visita, llevaré mascarilla y un rollo de papel higiénico.